Además, el sistema modular y único de cambio de cartuchos con una robusta función de bloqueo es bastante sostenible:
se puede ahorrar hasta un 56% de plástico al comprar un cartucho en lugar de un rotulador completo, lo que supone 10,6 g menos de plástico. El cartucho está compuesto por un 95% de plásticos reciclados.